Tipos de licencia y permisos para abrir un negocio

Si estás pensando en abrir un negocio en el siguiente artículo te explicamos los diferentes tipos de licencia y permisos que necesitas para abrir un negocio. Sigue leyendo para conocer todos los datos necesarios para abrir una empresa con las mejores garantías legales y todos los papeles en regla.

Permisos básicos para abrir un negocio

Para empezar a trabajar y abrir cualquier tipo de negocio es necesario contar con una licencia de apertura y de actividad. Se trata de una licencia municipal que es obligatoria para poder realizar cualquier tipo de actividad bien sea de servicio, comercio o industrial en todo tipo de oficinas, naves o locales. Es sencillamente un documento acreditativo del buen cumplimiento de las diferentes condiciones de habitabilidad y también de la utilización de la actividad para la que se hace efectiva la licencia.

Este tipo de licencia se debe conceder de forma directa al dueño o duela de un negocio y sin duda esta licencia de apertura y de actividad se debe renovar si se cambia la actividad que se va a desarrollar en el local o negocio, si hay algún tipo de obra o modificación en el local y por supuesto si la empresa o negocio cambia de propietarios, como podría ser por ejemplo el caso de un traspaso.

Como nos recomiendan los arquitectos de arkespai, a la hora de seleccionar este tipo de licencias se deben tener en cuenta algunos puntos que el negocio o empresa deberá cumplir.

En primer lugar, la primera de las exigencias se relaciona de forma directa con el local. El lugar en que se va a ubicar el comercio debe contar con las características adecuadas a la actividad que se va a desarrollar en este lugar, así como la empresa deberá cumplir totalmente la normativa que regule su tipo de actividad para poder ejercer dicha actividad. Es por todo ello que resulta clave conocer todos estos puntos y requisitos antes de solicitar la licencia para poder evitar cualquier tipo de cambio inesperado o de costes de última hora.

Se debe revisar muy bien que el local que se va a seleccionar cumpla con todas las normativas antes de comprarlo o alquilarlo. Hay que valorar también que las normativas son cada día más exigentes y muchos locales que antiguamente sí contaban con licencia de apertura en la actualidad no cumplen con los requisitos que se demandan. También se debe comprobar cualquier tipo de deuda, impago o carga fiscal que pueda tener un negocio para no heredarlas y empezar ya con problemas en el nuevo negocio.

Tipos de licencia para abrir un negocio

Asimismo, encontramos dos tipos de licencias diferentes para empresas que tienen en cuenta el grado de daño, riesgos o molestias a las personas de las actividades que se desarrollarán en la empresa.

En primer lugar encontramos la licencia para actividades inocuas. Este tipo de licencia es para las empresas que no generan o pueden llegar a generar ningún tipo de molestia significativa. Esto es, que no cuentan con un gran impacto medioambiente en términos de higiene o salubridad, no suponen riesgo para personas, bienes o bienes públicos y en general no pueden afectar a la población de ninguna manera. Son actividades inocuas la mayor parte de comercios como las tiendas de alimentación con productos no perecederos o las tiendas de ropa. Resulta mucho más sencillo legalizar este tipo de actividades, los costes son menores y los requisitos demandados también aunque normalmente a la solicitud se debe adjuntar también un informa en el que se incluyan los planos elaborados por un buen profesional.

Por otro lado encontramos las actividades calificadas. Se trata de todo tipo de actividades para las que se necesita implementar medidas correctivas, así como también de seguridad, sanitarias o medioambientales. Este tipo de actividades pueden ser insalubres, molestas o hasta peligrosas para las personas. Hablamos de negocios como la hostelería, algunas actividades industriales o diferentes comercios. Algunos de estos tipos de negocios solamente se pueden abrir en suelos industriales y siempre tienen que contar con el apoyo de proyectos técnicos completos.

Por último cabe reseñar que quedan exentas de licencia las actividades artesanales, artísticas y profesionales que se hacen a domicilio sino existe venta directa o atención directa al público y por supuesto si no se molesta al resto de vecinos y ciudadanos.